“Porque vendrá un tiempo en que los hombres no soportarán la doctrina sana, sino que, arrastrados por su propias pasiones, se harán con un montón de maestros por el prurito de oír novedades”

(2 Tim 4,3)









viernes, 20 de noviembre de 2009

El extraño juego del amor


Puede ser, que si algún día te vas yo me convierta en un sabueso y vaya detrás de tu olor y que si no puedo encontrarte camine hasta muy lejos con mi mochila llena de recuerdos. Y allí mi guitarra sera mi única compañía. Que cada noche haga una fogata para calmar el frió que sentiría al no tenerte y la luna podría sentarse junto a mi, para escuchar las canciones que tocaría para ti... pero también pudiera ser que la luna no viniera, que no hubiera fogata, ni guitarra, ni canciones, ni camino, ni días de soledad; tal vez solo existas tu o quizás no, quizás solo sea yo el que exista, pero tal vez ni siquiera yo, y solo sea el amor que existe y que juega a inventarnos y creer que existimos.

lunes, 2 de noviembre de 2009

Si te tomas un café, quiero que sea conmigo


En una gran sala hay una vieja mesa, sobre ella una taza con un café que se enfría. Yo la miro, mientras sorbo a sorbo voy recordando y veo que no vienes a tomar ese café conmigo. En el aire se entrelazan una combinación de olores; por un lado el aroma de aquel café y por el otro el de la tierra que fue mojada por una suave lluvia de aquel inolvidable veintidós de junio. En el que te extrañe porque te estuve buscando y no estabas. Desde entonces no he vuelto a ver tu tierna sonrisa, extraño tu sabiduría y aquellos ojos tristes que no me miran mas.

Ahora quisiera poder volver a abrazarte y decirte lo mucho que te quiero y que jamas he de olvidarte. La vida mía completa cambió por el amor que me diste y por las frases sabias que me decías.


(A mi querida e inolvidable abuelita Diana, que ya vive con Dios)

sábado, 26 de septiembre de 2009

Que alguien me diga


En un día cualquiera de esos en que hace bastante calor, me encuentro sentado en un viejo banco y cobijado por un gran árbol. Tomo mi periódico y mientras lo voy leyendo, veo otra noticia sobre aquel amigo que fue tan coherente, al saber combinar lo que predicaba con lo que hacia. Que verdaderamente supo cumplir con la misión a la que Cristo nos llama. Amando al prójimo, “no a parte de este, sino a su totalidad”. Y que ahora después de enviarlo lejos por esto, todos lo llaman “enemigo de nuestra patria” o con un calificativo que me impactó de veras; que el solo es “un hombre enfermo”. La sorpresa no es tanto por la forma de llamarlo, sino por la persona que lo dice. Entonces vienen a mi mente varias preguntas:

¿Será que está mal denunciar la opresión al más débil? ¿Esta mal ser coherente a los principios y enseñanzas de aquel que nos dio la mayor muestra de amor? ¿Acaso esta mal promover la igualdad de todos los seres humanos? ¿Esta mal ver mas allá del color de la piel de las personas? ¿Está mal amar y defender a los despreciados y combatir a los que les maltratan?

Me detengo un poco en mi mar de preguntas y dudas, cruzo la pierna, doblo el periódico y trago fuerte pues se me ha hecho un nudo en la garganta y mis ojos se nublan ante tantas interrogantes e indiferencia.

Pero no paro y continuo meditando, ahora pienso en saber si es que esta bien guardar silencio ante las injusticias y maltratos. ¿Esta bien ir por el mundo sin mirar el maltrato a los que son mas débiles? ¿Esta bien teorizar sobre el derecho de todos los seres humanos, sin velar para que esto en verdad se practique? ¿Esta bien permitir la distinción de personas, simplemente porque no tengan igual color de piel? ¿Esta bien hacernos los ciegos y a la vez cómplices de acciones o personajes que van en detrimento de los mas pequeños?

Ahora pienso, en que si todo esto es así, entonces estamos viviendo en un mundo que esta “patas para arriba”. Me pongo de pie y empiezo a caminar y mientras lo hago voy pensando en que Dirá Cristo que tanto predico el amor a los demás y que denuncio las injusticias humanas…

sábado, 19 de septiembre de 2009

Historia de un amor que no nació


En estos tiempos, en que para algunos el amor ya no existe o no esta de moda, en que el interés, la conveniencia o la búsqueda de satisfacer los bajos instintos es lo mas importante. Un chico esta buscando, que ella lo mire con esos ojos que tanto le gustan, para que así el ya no tenga mas miedo a la oscuridad, pues tendrá la luz que pudiera iluminar toda la oscuridad que hay en su camino. Y entonces sucede lo inesperado, ella solo pasa de largo sin alzar la cara o fijar los ojos en el, que ahora esta triste y cabizbajo.

El chico, desconoce lo que ella lleva oculto en su maltratado corazón, que ahora tiene miedo a amar. Ella ha dejado de creer que el amor es lindo, pues siempre que ha amado la han utilizado y la han dejado con su eterna sed de amor. Ahora, piensa que todos serán iguales con ella y va por ahí sin esperanzas. Ella y el tienen historias diferentes, dos corazones diferentes pero comparten un mismo anhelo, que es poder encontrar "su verdadero amor"

jueves, 30 de julio de 2009

Estas 106 palabras son para ti


Perdón, pero me atreví a mirar a través de tus ojos y alcance a ver tu corazón, estaba ahí en un rinconcito tirado y abandonado. Esta opaco, pues ya no emite esa luz que emitía cuando eras un inocente niño, que quería hacer el bien a los demás, para así hacer un mundo distinto.


Sino tomas el control y le cambias el ritmo de su música, corres el riesgo de que el se olvide de bailar. Volviéndose un duro artefacto, que solo mantendrá vivo tu ser y ya jamás serás sensible al dolor que afecta, a aquellos que viven oprimidos en el mundo de las injusticias.

miércoles, 15 de julio de 2009

Una dimension no muy conocida


Cuando te hablan de otras dimensiones, seguro que te imaginas un episodio de ciencia ficción o algo imposible. Pero también deberías pensar en aquella vez en que un hombre que caminaba a tu lado, tu le hablabas y el ni se enteraba, porque estaba inmerso un aventura de la que ya jamás podrá regresar. Aunque podías verle, solo su cuerpo estaba ahí, pues su mente le ha jugado una broma muy cruel y se le ha ido volando a un lugar lejano. Está descalzo, su piel esta quemada por el sol, nunca mira a los ojos de los demás y a veces sonríe sin un motivo aparente. A pesar de todo tiene un trabajo, que para el es importante; se dedica a recoger piedras del camino. El se cubre con las nubes, cuando llueve o hace frío y para comer consigue manjares en los botes de basura de aquel restaurante, que es atendido por esas "personitas" con ojos extraños. Dime tú, si esto no es vivir en otra dimensión, pues estas personas parecen escuchar una canción distinta a la que nosotros escuchamos.

Así, como nos sorprendemos al verles actuar de modo distinto y le llamamos “locos”, ellos quizás estarán pensando lo mismo de nosotros. Lo que si sabemos, es que para todo hay un propósito y que debemos cuidar y tenerles paciencia a las personas con problemas mentales. Dios nos ha creado por amor y nos manda a amar a todos por igual.

miércoles, 8 de julio de 2009

Inolvidable viaje, al centro de mi mente (SEGUNDA PARTE)


Se ha ido la luz, mientras escuchaba música en la radio y sin nada que hacer, me dirijo a la habitación a tientas, para encender lo que llamo “planta de emergencia” o como los demás le suelen llamar “una vela”. Ah, ya se que haré, me iré a pasear... pero será por los caminos que llevan al parque de mis recuerdos. Entonces, me recuesto en mi cama a meditar y emprender mi nueva ventura por aquellos lugares escondidos y oscuros de mi mente. Ahí estoy en el momento que me compraron mi primera (y tan anhelada bicicleta), disfrutaba correr por la calle con mi hermanita montada en la parrilla de atrás y mis amigos corriendo por alcanzarnos. Mientras pensaba en esto, mis ojos deciden pestañar y llevarme al instante en que descubrí lo bonito de ser un niño enamorado. Sonreír y quedarme mudo, al encontrarme al lado de esta linda niña que llenaba mis días de alegría, era algo fuera de serie. Seguro que hasta Dios se alegraba, al verme disfrutar de aquel tierno sentimiento.



Ahora, voy al instante en el que aprendía a tocar la guitarra con mis amigos españoles y luego percibo el sentimiento de la “nerviosa pero emocionante noche” que tocamos en la parroquia. Sigo caminando y viendo, ahora me detengo en el instante en que fui actor de teatro (bueno si, aclaro, solo fue una obra en la parroquia), estábamos representando la Pasión de Cristo, yo andaba súper nervioso, pero al ver a mi madre feliz y orgullosa en uno de los asientos y luego sentir los aplausos que nos brindaban todo fue paz y regocijo. Creo que Dios me bendijo bastante, aquella noche.


Un gran estruendo me hace volver de mis pensamientos lejanos, era la música de mi vieja radio, pues había llegado la luz. Entonces, me siento en la cama, miro el reloj, cambio la emisora y me creo ser un dichoso, pues he encontrado una canción que dice; “mi despertar y mi atardecer, todo se lo debo a El…”. Esta, quizás era una señal divina que me indicaba que las cosas que he vivido han sido el mejor regalo y que la felicidad no es una meta sino una forma de vida. Gracias papá Dios!!!

miércoles, 1 de julio de 2009

Viaje inolvidable, al centro de mi mente (primera parte)


Los recuerdos, son como una especie de bitácora de nuestro viaje por estas tierras. Buscando, en el archivo que tengo guardado en un rinconcito de mi mente, encuentro una carpeta etiquetada como muy especial, en la que miro varios instantes inolvidables. Como la vez, que me compraron mi primer cuadernito (no me cansaba de mirarlo), paso la pagina y voy al momento en que yo le agarraba la manita a mi hermano, para que aprendiera a escribir las vocales, mas abajo veo cuando fui con mi padre, a ver una película cristiana.

Algo verdaderamente especial para mi, era cuando en un día lluvioso, mi familia dormía la siesta y mi padre salía a comprar café y galletitas (mami me despertaba diciéndome que dejara un poco de sueño para la noche), esto es irrepetible en verdad. Wao! Aquí hay algo que me marcó mucho y es verme vestidito de blanco y negro en al iglesia, el día que hice mi primera comunión (esa noche se fue la luz, pero mi corazón ardía con luz propia, al estar recibiendo el cuerpo y sangre de Cristo). Y en la siguiente página, veo otra imagen de lluvia; es una de las tardes en que llovía y mi madre nos buscaba para acurrucarnos (como a pollitos), hasta la casa.

Esta que veo aquí casi ni me la creo, es de la vez que fui a una cueva llamada del “Fun Fun” y bajé a si interior como todo un alpinista, colgado de cables y muerto de miedo, pero jurando que quería hacerlo de nuevo. Por un instante me distraigo y visualizo el reloj, que esta sobre la nevera... me doy cuanta que son las 11:00 de la noche y debo dormir porque mañana hay trabajo. Coloco de nuevo la carpeta en su sitio y me prometo a mi mismo, que seguiré con este viaje por mi mente en la nave de mis recuerdos…